PUEDE SER ILEGAL
La economía del trueque parece haberse instaurado en el
mercado laboral español. Está creciendo una moda que consiste en cambiar
alojamiento por trabajo. El ofertante da alojamiento a cambio de que el demandante realice algún tipo de trabajo.
Muchos ya lo han probado. Algunos dicen haber ayudado a sus
'caseros' a construir un suelo de madera o incluso un barco. Sin embargo, hay
ofertas que se parecen más a un trabajo no remunerado que a un trueque. Por
ejemplo encontramos webs que buscan una pareja que pueda
cuidar niños durante cinco horas al día.
Hay otras ofertas que piden gente con idiomas, que sea capaz
de editar vídeos o que tenga un fácil manejo de las redes sociales. En
definitiva, un trabajo no remunerado en vez de esa vocación de intercambio con
la que nació este tipo de negocio.
Ante el crecimiento de este tipo de ofertas abusivas, los
sindicatos alertan de un más que posible crecimiento del esclavismo laboral a través
de estas ofertas. Una cosa totalmente atípica en los tiempos que
vivimos.