Coronavirus
El coronavirus también afecta al campo. Comienza la temporada de recogida de fruta en varias comunidades, que durará hasta la vendimia en octubre. El problema es que se necesitan más de 100.000 trabajadores. Muchos de ellos extranjeros, que no van a llegar.
Los trabajadores provienen de países como Rumanía, Bulgaria o de países africanos como Marruecos o Senegal. Las fronteras cerradas debido al coronavirus les ha dejado sin la posibilidad de entrar en España para la recogida de la cosecha.
Este es el principal problema de los agricultores. Les surge el miedo de no poder coger estas grandes cosechas que comienzan ya, como las de la nectarina. Y, ante ello, hacen un llamamiento a todo aquel que pueda acudir a recoger las próximas cosechas.
Algunos agricultores afirman que de los últimos 40 años, esta campaña de es una de las peores. Y es que la recogida de la cereza comienza en el mes de abril. Le sigue el albaricoque, el melocotón, la pera y la uva.
Cinco meses de temporada en los que se podría perder alguna cosecha si continúan las reducciones de la movilidad debido al Covid-19. Una de las consecuencias más claras de la falta de mano de obra y de la pérdida de la frura es el aumento del precio en estas frutas.