CON UN SUELDO MENSUAL DE 1.500 EUROS MÁS COMPLEMENTOS
Sandra tiene 26 años. Trabaja de enfermera con un contrato temporal. Como ella, 40 diplomados pronunciarán a partir de ahora su profesión con acento alemán.
Todos entonan la misma frase: "me voy a trabajar a Alemania" y lo dicen con motivos ya que han sido los elegidos entre cientos de enfermeros para aprender ese idioma. Un curso gratuito e intensivo que, a su término, les garantiza un puesto de trabajo en la Cruz Roja germana o en hospitales de Frankfurt. A dos mil kilómetros de casa necesitan enfermeros y los buscan en Madrid.
Todos ellos se convertirán en emigrantes a partir de junio y tendrán el billete de ida con el sueño de un buen sueldo: 1500 euros al mes más complementos. Las empresas privadas se desplazan a Madrid para conocer a sus empleados y firmar el contrato. A cambio, ellos solo tienen que aprender el idioma.
Su decisión es irrevocable y está motivada por las circunstancias. Pasan de un país con el 24% de paro a otro en el que el porcentaje sólo tiene una cifra. Forman parte de la generación más preparada, la que pone nombre a su futuro en un idioma extranjero.