ECONOMÍA
La inflación interanual se ha situado en noviembre en el 2,9%, lo que supone un descenso de seis décimas respecto a la tasa de octubre, debido fundamentalmente a la caída de los precios de las gasolinas, según el indicador adelantado del índice de precios de consumo (IPC) publicado por el INE.
El dato definitivo se conocerá el próximo 13 de diciembre y, de confirmarse, supondría una importante mejora en la tasa interanual del IPC, después de que ésta se situara en octubre en el 3,5 %, la más alta desde mayo e 2011.
El Instituto Nacional de Empleo (INE) también ha publicado el indicador adelantado del IPC armonizado (Ipca), que mide la evolución de los precios con el mismo método en todos los países de la zona del euro, según el cual, la inflación interanual se ha mantenido en noviembre en el 3%, cinco décimas menos respecto al mes anterior.
El descenso de la inflación interanual rompe la senda alcista mantenida desde hace cuatro meses e iniciada en julio, aunque el IPC todavía mantiene tasas cercanas a las de agosto, cuando el índice se situó en el 2,7%.
En el desplome de la inflación interanual de noviembre ha repercutido la bajada de los precios de los carburantes y lubricantes en este mes, ya que el precio de la gasolina se ha reducido un 8,41%, y el del diesel un 5,46%, tras haber registrado máximos históricos en septiembre.
Precisamente, el pasado 12 de septiembre el ministro de Industria, José Manuel Soria, se reunió con los máximos responsables de las petroleras, Repsol, Cepsa y BP para pedirles que contribuyeran a controlar el IPC.
No obstante, según el Boletín Petrolero de la UE, los precios medios de los carburantes en España han tenido una muy leve subida en la última semana, y se ha detectado una tendencia moderadamente alcista en la segunda quincena del mes.
Lo cierto es que el IPC ha mostrado una senda alcista desde julio, cuando alcanzó una tasa interanual del 2,2 %, aumentando hasta el 2,7 % en agosto, hasta el 3,4 % en septiembre y hasta el 3,5 % en octubre.
Revalorizar las pensiones en 2012 costará 3.800 millones adicionales
La revalorización de las pensiones, derivada de la desviación de la inflación en 2012, tendrá un coste para las arcas públicas de 3.800 millones de euros si finalmente el Gobierno decide aplicarla. Del importe total, la mitad (1.900 millones) son para compensar la pérdida de poder adquisitivo de este año y la otra mitad para consolidar el alza de la pensión en 2013.
La Seguridad Social desembolsará esa cantidad si el dato definitivo de IPC de noviembre -que se conocerá el 13 de diciembre- coincide con el indicador avanzado por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que sitúa el alza de los precios en el 2,9 % La inflación de noviembre es la que se toma como referencia para actualizar las pensiones, según lo establecido en la ley de la Seguridad Social, aunque el Gobierno todavía no ha confirmado si lo hará.
Como las pensiones ya han subido el 1 % en 2012, la compensación sería de 1,9 puntos, equivalentes a 1.900 millones teniendo en cuenta que cada décima de desviación equivale a alrededor de 100 millones.