EVOLUCIÓN DE LOS MERCADOS
La Bolsa española ha bajado el 2,76 por ciento, la sexta mayor caída de este ejercicio, y ha registrado un nuevo mínimo anual en 6.846 puntos al extenderse a la deuda de Francia y Holanda el ataque de los especuladores y por malos datos de actividad en Europa.
Con la prima de riesgo en 434 puntos básicos, el índice de referencia de la Bolsa española, el IBEX 35, ha cedido 194 puntos, el 2,76 por ciento, hasta 6.846,60 puntos, nivel similar al de marzo de 2009. Las pérdidas anuales aumentan al 20,08 por ciento.
En Europa hubo resultados peores, ya que Milán bajó el 3,83 por ciento; Fráncfort, al 3,36 por ciento; el índice Euro Stoxx 50, el 2,87 por ciento; París, el 2,83 por ciento; y Londres, el 1,85 por ciento. La subida del 0,5 por ciento de Wall Street el viernes y el leve alza de la actividad industrial en China este mes no servían para que la Bolsa española afianzara el rebote de la víspera.
La victoria del candidato socialista, François Hollande, en la primera vuelta de las elecciones francesas y los problemas de gobierno en Holanda, que acabaría luego con la dimisión del primer ministro, Mark Rutte, por la imposibilidad de acordar ajustes presupuestarios, afectaban al mercado nacional. La deuda holandesa subía al 2,42 por ciento y la francesa al 3,14 por ciento.
Así, una hora después de la apertura, la Bolsa española, que continuaba en precios de marzo de 2009, bajaba más del 3 por ciento y se acercaba a 6.800 puntos. El resto de la jornada transcurrió sobre este nivel.
España volvía a entrar en recesión al bajar el PIB el 0,4% en el primer trimestre y se conocía el descenso de la actividad manufacturera en Alemania y en la zona euro este mes, según datos provisionales. La mejora del déficit de la zona euro, que acabó 2011 con déficit del 4,1 por ciento del PIB, o el apoyo que recibía España del BCE o del FMI, que instaba a Alemania a emitir eurobonos. Al contrario que la semana pasada, los resultados y las noticias empresariales de Conoco, Kellog o Wal Mart, eran mal acogidas por el mercado.
La apertura a la baja de Wall Street, que cedía cerca del 1 por ciento y perdía el nivel de 13.000 puntos, incrementaba las pérdidas de la Bolsa española, que volvía a acercarse a 6.800 puntos con una caída del 3 por ciento.
Al final de la sesión, se moderaba el rendimiento de la deuda, que había superado el 6 por ciento en la apertura, así como la cotización del euro, que se acercaba al 1,31 por ciento, y del petróleo Brent, que se cambiaba a 117,5 dólares, y el mercado bursátil bajaba menos que la mayoría de las principales plazas europeas.
Todos los grandes valores bajaron: Repsol, el 5,97 por ciento; Iberdrola, el 2,78 por ciento; Telefónica, el 2,76 por ciento; BBVA, el 1,92 por ciento, y Banco Santander, el 1,54 por ciento. Sacyr Vallehermoso lideró las pérdidas del IBEX y de la bolsa con una bajada del 12,45 por ciento, seguida de ACS, que cedió el 10,09 por ciento, y de FCC, que descendió el 5,97 por ciento.
Sólo una compañía del IBEX, Indra, consiguió ganancias en esta jornada al subir el 0,34 por ciento, en tanto que la menor bajada es del 0,6 por ciento. Después de Sacyr, en el mercado continuo destacó la caída del 10,58 por ciento de Vértice 360, mientras que Zeltia comandó las subidas, el 13,26 por ciento, después de anunciar avances en el desarrollo de un fármaco contra el cáncer en los Estados Unidos.
La rentabilidad de la deuda española a largo plazo subía cuatro centésimas y se situaba antes del cierre en el 5,98 por ciento, mientras que el rendimiento de los títulos germanos bajaba seis centésimas y quedaba en el 1,64 por ciento. El efectivo negociado se ha situado en 2.932 millones de euros, de los que cerca de 800 millones fueron intermediados por inversores institucionales.