EL IBEX PIERDE UN 4,69%
La bolsa española se ha desplomado este lunes el 4,69%, su tercera mayor caída del año, y se ha quedado a las puertas de perder los 8.000 puntos, debido a los renovados temores a una recesión mundial alentados por los avisos del Fondo Monetario Internacional (FMI).
El principal selectivo del mercado español, el Ibex 35, ha terminado la jornada en 8.066,50 puntos, continuando así la corrección iniciada el viernes, cuando algunos datos económicos ya apuntalaban la falta de crecimiento de grandes economías de la talla de EEUU.
No obstante, el indicador fue de los que menos cayó en Europa, donde la mayor penalización correspondió al alemán DAX, con un descenso del 5,28%, seguido del italiano FTSE MIB, con el 4,83%; del francés CAC 40, con el 4,73%, y del británico FTSE 100, con el 3,58%.
Las turbulencias también se dejaron sentir en el mercado de deuda, donde la prima de riesgo de España frente a Alemania alcanzó los 341,3 puntos básicos ante la compra masiva de bonos germanos, que actúan como activo refugio frente a los vaivenes bursátiles.
Temor a una recesión mundial
"En los mercados está pesando la crisis de la deuda europea, donde no se producen demasiados avances, y el temor a una mayor desaceleración que puede llevar a una recesión a nivel mundial", resumió la directora de Análisis de Renta 4, Natalia Aguirre.
De hecho, la jornada empezó tal y como había terminado la semana pasada, con fuertes correcciones, después de que la directora del FMI, Christine Lagarde, advirtiera este domingo del riesgo de que la economía mundial vuelva a entrar en recesión de forma "inminente".
Aunque esa situación todavía se puede evitar, Lagarde añadió más leña al fuego al asegurar que la capacidad de actuación es ahora menor que hace dos años y que para ello hace falta recapitalizar la banca europea, que necesitaría unos 200.000 millones de euros adicionales.
La contestación del presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, que afirmó que la Unión Europea crecerá de forma modesta pero sin caer en una recesión, no calmó el ánimo vendedor de los inversores.
Con el telón de fondo de las declaraciones de Lagarde y la falta de resolución de los problemas de la reestructuración de la deuda de Grecia, las entidades financieras fueron los valores más castigados en Europa y en menor medida en España, donde el Santander se desplomó no obstante el 5,94%, mientras que el BBVA se dejó el 5,79%.