INFORME DE OXFAM INTERMÓN
El trabajo, presentado en rueda de prensa por el director general de la ONG, José María Vera, la responsable de Investigaciones, Teresa Cavero, y el presidente de GESTHA, Carlos Cruzado, pone de manifiesto con datos de 2011 que en España se "beneficia sistemáticamente" a las grandes empresas y no se cumple la máxima "tanto tienes, tanto ganas".
Según explica, los ciudadanos aportaron en 2011 al Estado 139.737 millones de euros, el 90,76 por ciento del total, mientras que las empresas pusieron el 9,24%, 14.529 millones de euros, fruto de beneficios y ventajas fiscales que han reducido un 64% la recaudación vía impuesto de sociedades y provocado que frente al 30% de tipo efectivo que deberían pagar, estén abonando sólo el 3,5% de sus beneficios.
Dentro de los ciudadanos, también hay desigualdad pues los más pobres hacen un esfuerzo fiscal igual o superior a los más ricos. El informe revela que los hogares con ingresos más bajos destinaron entre un 30 y un 36% de sus recursos a pagar impuestos en 2011, mientras las familias de nivel medio emplearon el 22% y las más ricas no llegaron al 30%. Cuando se tienen en cuenta las familias un nivel menos pobres y las familias un nivel menos ricas, la diferencia es de 15,3 frente a 23,2 por ciento.
"No es sólo una cuestión de recaudación, sino de equidad. Lo que dejan de pagar las empresas lo tenemos que pagar otras personas y se dejan de financiar políticas públicas para apoyar precisamente a las personas en situación más vulnerable", explica Cavero, para incidir en que estos ciudadanos están "contribuyendo por encima de lo que les corresponde".
La "baja capacidad redistributiva" se ha visto agravada por las subidas del IVA y los impuestos especiales, ya que, conforme destaca Oxfam Intermón, recae sobre familias con rentas medias y bajas. "La única figura que contribuye a la progresividad es el IRPF", asegura el informe.
En este contexto, la organización alerta del "suicidio" que sería reducir el impuesto sobre las rentas y elevar el IVA de nuevo mientras se rebajan los salarios y se mantienen las exenciones fiscales a grandes empresas, porque, en palabras de Vera, estas han sido las recetas del Fondo Monetario Internacional en los últimos años para América Latina y el resultado ha sido "una desigualdad extrema" en sus ciudadanos.