en un comunicado
El expresidente de BBVA, Francisco González, salió este martes de su silencio para defender que la actuación del banco “en su conjunto” ha “sido intachable y con un cumplimiento por encima de lo exigible en materia de gobierno corporativo y cumplimiento normativo” tras la imputación de la entidad por parte de la Audiencia Nacional en el ‘Caso Villarejo’.
El banquero había decidido dejar "temporalmente" sus cargos en el grupo el pasado 14 de marzo donde ejercía la presidencia de honor tras haber dado el relevo el pasado año en la primera línea a Carlos Torres, precisamente ante las investigaciones abiertas por el escándalo de las supuestas escuchas masivas vinculadas con el grupo Cenyt, empresa ligada al excomisario José Manuel Villarejo.
Tras dar un paso al lado se había mantenido fuera de focos. Sin embargo, tras la imputación de BBVA por parte del Juzgado de la Audiencia Nacional emitió este martes una declaración institucional justificándola en que el banco es “una gran institución”, con más de 125.000 “excelentes profesionales en España y a nivel internacional”, millones de clientes, numerosos accionistas y un impacto social muy relevante. “Por ello, considero muy importante afrontar la investigación abierta con total transparencia, y ayudar a deslindar posibles actuaciones individuales de carácter irregular, si las hubiera, de la actuación del banco en su conjunto, que no me cabe duda, ha sido intachable y con un cumplimiento por encima de lo exigible en materia de gobierno corporativo y cumplimiento normativo”, refiere en un comunicado.
El banquero, que según algunas informaciones también podría ser llamado por el tribunal al ser los contratos firmados con Cenyt de su etapa, defiende que durante su presidencia en BBVA trabajaron “bajo unos estrictos estándares de conducta”.