LOS PRINCIPALES COMPRADORES SON JÓVENES CON POCO APEGO A LAS MARCAS
Los españoles gastaron alrededor de 1.000 millones de euros en productos falsificados durante 2012 y, a pesar de ser conscientes de los efectos negativos de esta acción, un tercio de la población prevé seguir comprando.
Así se ha puesto de manifiesto durante la jornada 'El fenómeno de las falsificaciones' que se ha celebrado este viernes en Las Palmas de Gran Canaria por el Día Mundial Antifalsificación, cuya inauguración ha corrido a cargo del subsecretario del Ministerio de Industria, Energía y Turismo, Enrique Hernández Bento.
En el transcurso de la cita, la directora general de la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM), Patricia García-Escuderos, ha presnetado el informe La actitud del consumidor frente a las falsificaciones.
En el mismo se recoge que el perfil del consumidor que compra falsificaciones es una persona joven, de entre 18 y 29 años, residente en municipios de más de 500.000 habitantes, con bajo grado de fidelidad a las marcas y poco concienciado con las consecuencias negativas de las falsificaciones.
Los principales productos falsificados comprados durante 2012 son artículos de vestir (68,5%), perfumería y cosmética (35,8%), marroquinería y complementos (35,2%), prendas y deportivos (34%), calzado (26,5%),y relojería y joyería (24,7%), además de equipos audiovisuales, tabaco, juguetes y accesorios de automóviles.