RETRASOS AÉREOS
La Unión Sindical de Controladores Aéreos (Usca) ha alertado de que el déficit de controladores y la "mala planificación" de la plantilla provoca ya algunos retrasos en las salidas de vuelos en aeropuertos como el de Barcelona, que cree que podrían agudizarse durante este verano.
Fuentes de Aena han negado estos retrasos y han asegurado que toman medidas para garantizar la normalidad durante el verano, pero han explicado que, en el período de más tráfico aéreo, un 40 % de la plantilla del centro de control de Barcelona, formada por unas 250 personas, pide reducciones de jornada o permisos.
El inicio de la temporada alta en el aeropuerto de El Prat de Llobregat, Barcelona, ha aumentado las tensiones existentes desde hace tiempo entre los controladores aéreos y Aena, que mantienen ahora un pulso en torno a la interpretación del convenio colectivo.
Una portavoz de Usca, Susana Romero, ha explicado que Aena "incumple" de manera reiterada el laudo arbitral con el que se cerraron los incidentes de diciembre de 2010, y que prohíbe los ciclos de seis días de trabajo y dos de descanso que intenta ahora imponer, en su opinión, el gestor aeroportuario. "La falta de controladores viene de lejos, del 2010 y 2011, y se está incumpliendo el laudo para forzar turnos de trabajo de más días y así subsanar la falta de estos profesionales", ha subrayado, tras advertir que ya se están produciendo demoras en las salidas de aviones.
Por su parte, Aena sostiene que el absentismo del colectivo de controladores ronda en verano y en Navidad el 20 %, frente al 5 % del resto de trabajadores del ente, y asegura que en verano las reducciones de jornada aumentan cerca de un 200 % con respecto al invierno. Además, comenta que los controladores que no son de este ente realizan 200 horas al mes y que, en cambio, el el centro de control de Barcelona llega a programar como mucho 170 horas mensuales en verano.
Asimismo, añaden que en el caso de Barcelona el tráfico acumulado al año ha descendido un 3 % con respecto al mismo período de 2012, pese a la tendencia positiva en España. Por su parte, un portavoz del aeropuerto de Barcelona ha asegurado que funciona "con normalidad" y ha negado retrasos por falta de controladores. Según el sindicato de controladores, muchos de los profesionales que tendrían que haber llegado derivados del proceso de privatización de las torres se encuentran todavía en periodo de formación y no están todavía, por tanto, capacitados para asumir el control del tráfico aéreo.