Algas
La empresa HQ Seaweed iniciará en septiembre el proceso para producir 20.000 kilos de kelp de azúcar.
Cada vez son más las personas que incluyen diferentes tipos de algas en su dieta. Una fuente de minerales y vitaminas muy solicitada, dentro y fuera de España, con la que Galicia complementa su amplia oferta de alimentos relacionados con el mar. En base a esta creciente demanda, la compañía gallega HQ Seaweed ha decidido instalar cuatro bateas en la ría de Vigo. El objetivo es cultivar 20.000 kilos de 'Saccharina latissima', más conocida como kelp de azúcar.
"Es un tipo de alga que ya tenemos en nuestras costas, pero no se reproduce en grandes cantidades de forma natural y eso no permite explotarla", explica Sergio García, fundador de la empresa con base en Vilaboa (Pontevedra). Se trata de un alga de color pardo, a veces verde o rojizo, conocida también como cinturón de mar por su forma y longitud.
La instalación de las cuatro bateas tendrá lugar en los próximos meses, con el objetivo de realizar la primera 'siembra' en el mes de septiembre. Después, seis meses de cría hasta el momento de la recogida en marzo de 2024. Tienen previsto colocar dos estructuras bajo el puente de Rande y otras dos frente a Chapela.
Ideal para guisos y sushi
La técnica del cultivo en batea hará posible la explotación de un alga muy demandada en el mercado, no solo en Europa, sino también en Asia. Es ideal para recetas como el sushi, aunque también para acompañar sopas, guisos y salsas. "Últimamente nos pedían mucho esta variante", apunta el empresario.
La compañía calcula que se podrían recoger unos 20.000 kilos de producto, aunque es solo una estimación, puesto que es la primera vez que llevan a cabo esta estrategia de cultivo. HQ Seaweed lleva desde 2016 recogiendo otros tipos de algas salvajes en las Rías Baixas, como wakame, espagueti de mar, kombu y codium. Son distribuidores a nivel mundial de algas comestibles deshidratadas, en salazón, congeladas y frescas salvajes.
La parcela de explotación se encuentra dentro del polígono de bateas de la ría de Vigo, por lo que la empresa llegó a un acuerdo con la Consellería de Mar, a través del Departamento de Pesca y Agricultura, tras realizar un estudio de impacto en la zona. Ahora solo esperan el 'ok' definitivo para colocar las estructuras y empezar a trabajar en septiembre.