AEROPUERTOS FANTASMA QUE COMIENZAN A DESPEGAR
Pistas sin aviones, aparcamientos sin coches y terminales desiertas, una imagen que empieza a cambiar. El aeropuerto de Teruel es un ejemplo de cómo darle la vuelta al negocio, ya que se ha convertido en el mayor garaje aeroportuario de Europa. Mide 120 hectáreas, el equivalente a once campos de fútbol, y tiene capacidad para 250 aviones.
Además, desde esta semana, es la sede de una escuela de pilotos británica. Sus primeros alumnos acaban de aterrizar, atraídos por el buen tiempo. La formación es clave para ser rentables, pero también la investigación, tienen hasta un centro para probar cohetes.
El aeropuerto de Castellón también ha cambiado dejando los vacíos pasillos por los más de 89.000 pasajeros que ya han pasado por ellos y se espera que a finales de año sean 12.000. Registra casi 800 vuelos operados y un servicio de parking gratuito que le han hecho escalar varios puestos en el ranking nacional.
Por su parte, el aeropuerto de Ciudad Real, sigue igual que siempre, aunque será algo temporal, ya que quiere agilizar los trámites para poder operar cuanto antes.