Economía
La economía española ha crecido un 2,8% en el segundo trimestre de 2021 tras haber registrado en el primero un retroceso del 0,4% por la tercera ola de la Covid-19 y el impacto de la borrasca 'Filomena'.
El Producto Interior Bruto (PIB), la magnitud que mide el valor monetario de todos los bienes y servicios finales producidos por un país, ha marcado un crecimiento de la economía española en un 2,8% en el segundo trimestre de 2021.
Esta subida supone un repunte respecto a la caída del primer trimestre, gracias en parte al levantamiento de las restricciones para contener la tercera ola de la pandemia de la Covid-19, así como de impacto que ha tenido la borrasca 'Filomena' que azotó gran parte del país en enero.
De acuerdo con el avance de contabilidad nacional publicado este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la demanda nacional sumó 3,6 puntos al avance del PIB, una contribución que fue compensada en parte por la aportación negativa de 0,8 puntos de la demanda exterior.
El empleo de la economía, medido en horas trabajadas, aumentó un 4,4% respecto al trimestre anterior, mientras que los puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo disminuyeron un 0,2%, por alza de las horas trabajadas y el incremento de la jornada media.
Según puntualiza el INE en su nota, el avance de datos está elaborado con la información disponible hasta mayo, así como con algunos resultados adelantados a mes de junio. Esto, unido a la dificultad que ha supuesto para la medición estadística un cambio de coyuntura como el de la crisis del coronavirus, "hace prever que las futuras revisiones de los resultados hoy publicados puedan ser de una magnitud mayor que la habitual", concluye.
Crecimiento anual histórico
En comparación con un año antes, el PIB se disparó un 19,8%, repuntando respecto a la caída del 4,2% del trimestre precedente y marcando la mayor tasa de la serie histórica.
Ese dinamismo es consecuencia del efecto comparación con el segundo trimestre de 2020, cuando la economía estaba afectada de lleno por el estallido de la pandemia, llegando incluso a hibernar.
En esta comparativa interanual, la demanda nacional aportó 20,3 puntos al crecimiento económico, la contribución más elevada de la serie histórica, gracias al crecimiento récord del consumo de los hogares, mientras que la demanda externa restó 0,5 puntos.