Pisos turísticos
Cada vez hay más pisos turísticos. Proliferan en muchas ciudades de España y muchos están funcionando de forma ilegal. No cumplen con la normativa o no tienen licencia de actividad.
En el problema de la vivienda también juegan un papel clave los pisos turísticos. Cada vez hay más. Solo en lo que llevamos de año se han creado 60.000 nuevos, según los datos de Exceltur.
España nunca había tenido tantos, en total habría 286.858 viviendas de uso turístico en todo el país, un 25% más que el año pasado. Las principales empresas del sector turístico alertan del crecimiento 'desbocado' de estos pisos. Además, aseguran que muchos son ilegales, especialmente en Madrid. Hacemos un recorrido para analizar la situación.
Todas las viviendas turísticas deben contar con una concesión administrativa, la licencia de alquiler turístico. Este certificado acredita que la vivienda tiene calefacción, agua fría y caliente, un extintor y un plano de evacuación, entre otros requisitos.
Si un usuario quiere consultar que la casa que desea alquilar tiene licencia, normalmente viene indicada en las plataformas de reserva de casas turísticas más populares, siempre y cuando el propietario lo haya indicado.
En la capital hay unas 13.000 viviendas turísticas funcionando el problema es que solo 941 tienen licencia, según nos confirma el área de Urbanismo del Ayuntamiento de Madrid. Es decir, se calcula que el 93% son ilegales.
La normativa, por ejemplo, dice que tienen que tener una entrada independiente para no pasar por el portal. Algo que la mayoría cumple. Las asociaciones de vecinos son las que denuncian la existencia de estos pisos ilegales. De hecho, existe una Oficina de Afectados por las Viviendas de Uso Turístico que aglutina las quejas vecinales. Su portavoz, Víctor Rey asegura que no se hacen ni los controles ni las inspecciones suficientes para acabar que se cumpla con la ley.
En Vigo hay edificios reformándose ya para convertir viviendas en pisos turísticos y hay comunidades que se plantean cambios en sus reglamentos. Por ejemplo, limitar el acceso a zonas comunes como canchas deportivas o parques infantiles o subir un 20% las cuotas de la comunidad a estas viviendas intentando reducir las molestias.
Los propietarios toman medidas para paliar las molestias que les generan ante la pasividad de las administraciones para limitar este tipo de alquileres. O incluso hay quien decide vetarlos en su comunidad.
En Salamanca en lo que llevamos de año una media de 6 pisos turísticos están echando el cierre cada mes desde que la Junta de Castilla y León ha iniciado una campaña de control sobre estos establecimientos. Justo coincide con el aumento de las inspecciones. Es el doble de pisos y apartamentos que se dan de baja del listado oficial respecto a 2023, aunque en lo que llevamos de año otros 33 han abierto sus puertas.
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