El Departamento de Trabajo de Estados Unidos ha ofrecido los datos de desempleo en el país, una cifra negativa por la pérdida neta en julio de 131.000 puestos de trabajo, aunque el índice de paro se ha mantenido en un 9,5% de la fuerza laboral. No obstante, la secretaria de Trabajo, Hilda Solís, ha encontrado un aspecto positivo del informe en el incremento de 71.000 puestos de trabajo en el sector privado, incluidos 36.000 nuevos empleos en las fábricas que mantienen su crecimiento en lo que va de año. [[RELATED El paro baja en julio en España [[/RELATED "Tenemos una economía volátil, pero desde comienzos del año hemostenido un incremento de 630.000 empleos en el sector privado", ha apuntado Solís, quien ha enfatizado que "debe mantenerse el curso de la política económica ante una recuperación que resulta lenta". La mayoría de los analistas esperaba un aumento de 70.000 puestos de trabajo en el sector privado, y un incremento del índice de desempleo al 9,6%. Los datos han provocado una caída de cotizaciones en los mercados financieros donde los inversionistas habían calculado que la pérdida neta de empleos en julio sería de 125.000 o menos, y que la ganancia de puestos de trabajo en el sector privado rondaría los 100.000. Después de haberse contraído durante cinco de los seis trimestres hasta mediados de 2009, la economía de Estados Unidos ha estado creciendo en los últimos cuatro trimestres. Pero el ritmo de crecimiento ha aminorado de un 5,6% a fines de 2009 a un 3,7% en el primer trimestre de 2010, y un estimado del 2,4% entre abril y junio, según el Departamento de Comercio. Esto ha alimentado la preocupación por que el país pueda caer en una segunda recesión a medida que expiran los enormes programas de estímulo activados por el gobierno desde fines de 2008.