BRUSELAS
Este jueves los líderes europeos se reúnen en una cumbre decisiva con el objetivo de qué Hungría, Eslovenia y Polonia dejen de vetar el fondo de reconstrucción. Es el último paso para poder recibir las ayudas de la Unión Europea.
España y el resto de países de la Unión Europea tratan de convencer a estos tres estados que mantienen el bloqueo de las ayudas. No va a ser nada fácil que lleguen a un acuerdo este jueves, ya que el gobierno húngaro de Viktor Orbán quiere llevar este pulso mucho más allá retrasando así todas las ayudas.
El ministro de Gobernación de Hungría, Gergely Gulyás, ha insistido antes del comienzo de la reunión con los miembros de la UE en que no hay ninguna posibilidad de aprobar el presupuesto plurianual de la Unión Europea (UE) y el paquete de recuperación si no se elimina la condicionalidad del respeto al Estado de derecho. "
La probabilidad de que el presupuesto y el paquete de recuperación sean aprobados en su forma actual es cero", ha señalado durante una rueda de prensa.
BCE llama a poner en marcha las ayudas
La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Chirstine Lagarde, decía que cuando antes se debía de superar este veto que tachaba de "irracional" y llamó a poner en marcha "sin demora" el Fondo de Recuperación europeo bloqueado por los tres estados, para hacer frente a una segunda ola del coronavirus que "afectará severamente" a la economía de la eurozona.
Las ayudas tienen que ser aprobadas por los 27 países miembros de la Unión Europea, de no ser así este proceso podría alargarse hasta finales de 2021 o no llevarse a cabo. Unos presupuestos de 750.000 millones de euros.