LOS SINDICATOS DESCARTAN UN ACUERDO GENERAL ANTES DE REYES
El calendario del Gobierno mete presión a sindicatos y empresarios. El tiempo se agota con las posiciones aún alejadas. Ayer con su visita, la ministra de Empleo, Fátima Báñez les apremiaba a lograr un pacto, pero hoy los sindicatos avisan: el acuerdo podría no llegar a tiempo.
Las negociaciones entre patronal y sindicatos avanzan en temas menores como el traslado de algunos festivos, pero están lejos del acuerdo en asuntos que constituyen el núcleo duro de la reforma laboral que quiere hacer el Gobierno, entre ellos, los tipos de contrato o el control del absentismo.
Según fuentes cercanas a la negociación, sólo se pactará el traslado de algunos festivos al lunes más cercano, la ampliación de las materias laborales que se acogerán a la solución extrajudicial de conflictos y mejoras en el sistema de formación continua, asuntos que las partes esperan cerrar la próxima semana.
Más difícil se presentan las negociaciones en materia de contratación, causas de despido y reestructuraciones de plantilla y ETT, así como para la prórroga del acuerdo de moderación salarial más allá de 2012.
Con esos mimbres, patronal y sindicatos ya han puesto sobre la mesa del Ejecutivo los puntos que hacen más difícil el pacto. La CEOE defiende una congelación de salarios en 2012. También reducir la indemnización por despido. Apuestan, además, por fomentar los contratos a tiempo parcial y por eliminar el límite de edad en los de formación.
De frente, la postura de los sindicatos. En su reforma se mantiene la subida de salarios pactada hace casi dos años. Dentro de esa propuesta defienden la actual indemnización por despido. En cambio, sí aceptan un límite salarial, no para los empleados, sino en los sueldos de los directivos.
Ambas partes trabajan a contrarreloj. Una semana para el fin del plazo y mañana, fecha clave. El Gobierno presenta sus primeras medidas de ajuste en Consejo de Ministros, que podrían condicionar el pacto entre sindicatos y empresarios.