ENTERRADOS POR LA HERENCIA
La boda de Cayetana y Alfonso Díez ponía en guardia a los herederos de la Casa de Alba. En juego bienes por valor de tres mil millones de euros.
Una donación en vida podía poner a salvo la herencia pero temían que ella no quisiera. Cayetano recuerda que hicieron "una estrategia" para proponérselo. No debía parecer que los hijos estaban interesados en ese reparto en vida.
Por tributar en Madrid y no en Andalucía se ahorraban mucho dinero. La factura total de la herencia fue de unos 8.000.000 de euros.
Otro ducado el de Medina Sidonia está a punto de hundirse. Sin dinero en la casa y enfrentada a sus hijos ‘la duquesa roja’ mantiene el archivo hasta su muerte.
Sus hijos se quedaron sin herencia y comenzaron ocho años de luchas judiciales por un patrimonio difícil de valorar.
Los ricos tienen una ventaja, como tienen dinero pueden coger a los mejores para que los asesoren. Amancio Ortega es el segundo hombre más rico del mundo. Con 80 años lo tiene todo bien atado. Ya ha empezado a repartir parte de su patrimonio entre su familia, un testamento que mantiene en el más absoluto secreto.
Ya ha encontrado la fórmula para que los suyos paguen menos. El periodista Jesús Salgado explica que "en las herencias, como en otras cosas Amancio Ortega es un artista. Él llega un momento en el que se ve tal volumen de negocio que decide sacar la empresa a bolsa. ¿Eso fue una donación? Pues no. Digamos que te han pagado en especie, pero mientras que no la venda no tributa".