Coronavirus
Hay prácticamente unanimidad en que para luchar contra los contagios de coronavirus y evitar rebrotes más o menos masivos, como los que está comenzando a haber, es necesario realizar pruebas a la población y de forma rápida. Pero se está viendo que es difícil, muchas personas no acuden a las llamadas. Coincide con que los números más elevados de contagios se están dando en muchos casos en barrios de bajos ingresos de grandes ciudades.
Confinamiento igual a sin ingresos
Los técnicos en servicios sociales señalan una razón: los trabajadores temporales, en prácticas, autónomos y, sobre todo, los que trabajan en la economía sumergida no se pueden permitir dar positivo en un test de coronavirus, el confinamiento les deja sin ingresos. Según datos de algunas ONG hasta tres de cada cuatro trabajadores 'en negro' podrían haberse quedado sin ingresos por la covid-19. Para la jefa de proyectos de reinserción social de Cáritas en Barcelona, Dessiré García: "No se pueden confinar. Si lo hacen se quedan sin nada y nadie les puede ayudar".
Muchas de estas personas, inmigrantes sin papeles, trabajadoras del hogar, cuidadoras, vendedores ambulantes, 'chapuzas', jornaleros, viven al día y están en dos situaciones. No pueden pedir ayudas sociales o los trámites para solicitarlas o pedir el Ingreso Mínimo Vital son tan largos que no pueden esperar, sobre todo con la Administración ahora desbordada por tanto papeleo.
Según el Fondo Monetario Internacional, más de un 11% de la economía española es 'en negro'. Otras estimaciones elevan el trabajo sumergido por encima del 20% del PIB.