BANCO DE MADRID, UNA FILIAL DE BPA
El Banco Madrid, filial en España del andorrano BPA, ha dejado atrapados temporalmente a miles de clientes que ya no pueden acceder a su dinero, ya sea en depósitos, fondos de inversión o sicavs, que han quedado bloqueados.
A pesar de que a principios de la semana pasada, en el momento de su intervención, la entidad no presentaba problemas de solvencia, el escándalo sobre las implicaciones en el blanqueo de capitales del crimen organizado provocó una retirada masiva de fondos.
La denuncia presentada el pasado viernes contra Banco Madrid por la unidad de inteligencia financiera española, el Sepblac, ante el fiscal por operaciones irregulares, unida a la detención en Andorra del antiguo consejero delegado de BPA y su filial española, Joan Pau Miquel, contribuyó a desatar el pánico entre los clientes.
Tanto es así que hoy los nuevos administradores de la entidad especializada en grandes patrimonios, designados por el Banco de España, han solicitado el concurso de acreedores voluntario tras constatar que la capacidad de la entidad para hacer frente al cumplimiento puntual de sus obligaciones se había deteriorado.
La solicitud de concurso, ha explicado el supervisor en una nota, permite asegurar "un igual trato de los depositantes de la entidad y del resto de sus acreedores", pero evita disponer en este momento de esos fondos, una medida aún más grave que el límite de 2.500 euros semanales que se pueden retirar en la matriz, BPA.
Además, el concurso de Banco Madrid supondrá pérdidas para quienes tuvieran más de 100.000 euros ahorrados en la entidad, el máximo que cubre el Fondo de Garantía de Depósitos. A cierre de noviembre de 2014, unos 15.000 clientes tenían más de 695,6 millones depositados en Banco Madrid, pero está por ver qué cantidad atesora a día de hoy tras la espantada de sus clientes, que ahora esperan que un juez decida si la entidad tiene opciones de ser vendida al mejor postor o directamente debe ser liquidada, la opción más probable según los expertos.
Antes de eso habrá que decidir también si los fondos de inversión y sicavs gestionados por Banco Madrid y bloqueados por la CNMV pueden ser traspasados a otra compañía, lo que garantizaría que sus partícipes no pierdan dinero. Entre ellos se encuentran clientes tan conocidos como el exjugador del Real Madrid Roberto Carlos, cuya sicav contaba con un patrimonio de 2,8 millones a cierre de 2014, o el inversor de origen indio Ram Bhavnani, afincado en Tenerife, con 11,4 millones.
Sólo en el caso de que la gestora de Banco Madrid fuera declarada también en concurso, algo que a día de hoy no parece probable, se activaría la garantía del Fogain, que permitiría recuperar igualmente un máximo de 100.000 euros. Pero esta opción no se contempla porque los expertos dan por hecho que a través de una subasta rápida se elegirá otro banco que se haga cargo de la gestión de los fondos de inversión y sicavs de Banco Madrid, cuyo grueso del negocio estaba en estos vehículos.
Sólo a través de su gestora cuenta con unos 78.000 clientes, cuyo patrimonio supera los 3.000 millones a través de más de un centenar de fondos, según datos de Inverco. A pesar del escándalo, el ministro de Economía, Luis de Guindos, ha insistido hoy en que Banco Madrid no supone ningún riesgo para la banca española y que "no tiene absolutamente nada que ver con las intervenciones que desde el inicio de la crisis, por desgracia, tuvimos que realizar".
Se trata de un caso "muy específico y muy concreto" que afecta a una entidad pequeña, ha añadido. Se escribe así un nuevo capítulo de una historia que empezó el pasado martes cuando EEUU acusó a BPA, dueño de Banco Madrid, de lavar dinero de clientes como el Cártel de Sinaloa; Gao Ping, el supuesto cabecilla de una trama china; Andrei Petrov, presunto miembro de la mafia rusa y la petrolera estatal venezolana PDVSA.
Todo ello disparó las alarmas sobre su filial en España, también conocida por ser la entidad en la que la familia del expresidente de la Generalitat de Cataluña Jordi Pujol escondió parte de su fortuna.