Factura luz
Tras la última ola de calor, lo mejor es tener en cuenta los trucos para ahorrar refrescando la casa y que no se dispare la factura de la luz.
Julio ha dejado en España temperaturas inusualmente altas, con varios récords para estas fechas y el mayor número de muertos por calor en ese mes desde que hay registros, lo que ha obligado a muchos hogares en diferentes puntos del país a hacer uso de aires acondicionados y ventiladores. Con ello, laemergencia climáticase hace cada vez más evidente y, otro punto que preocupa a muchas familias, la necesidad de ahorrar mientras refrescan sus casas ante las olas de calor. Cabe destacar que, al precio actual del kilovatio hora (kWh), el impacto sobre la factura de la luz de cinco horas al día de aire acondicionado es de 70 euros al mes.
Por ello, a continuación recogemos los cinco consejos y recomendaciones procedentes tanto de las asociaciones de consumidores, como la OCU, como de los expertos. Aunque parezcan de sentido común, es conveniente recordarlos para ahorrar un susto en los bolsillos cuando llegue la factura de la luz.
Si se tiene unatarifa eléctrica regulada, es clave tener en cuenta la hora a la que se enciende el aire acondicionado. Como es lógico, los expertos recomiendan utilizarlo cuando sea más barato. ¿Cómo se puede consultar? En la página web del Operador del Mercado Ibérico de Energía (OMIE) se publican los precios del kWh en cada una de las 24 horas del día desde la tarde anterior, lo que puede ayudar a planificarse.
Es importante recordar que si se está sujeto a una tarifa libre, como las planas, el consumidor no está sujeto a estas variaciones horarias, aunque sí que pudiera estarlo a otras por lo que hay que mirar el contrato para tenerlo todo controlado.
Si finalmente se opta por usar el aire acondicionado, y una vez decidido cuándo se va a encender, lo más óptimo es dejarlo en torno a 27ºC, o 25 como mínimo, en lugar de ponerlo más bajo y estar quitándolo y encendiéndolo para intentar ahorrar. Los estudios estiman que por cada grado que se baje a partir de los 23 se consume entre un 5% y un 7% más de luz. Además, se debe tener en cuenta que el gasto también depende de la cantidad de frigorías necesarias para enfriar el espacio en el que se enciende el electrodoméstico, por lo que se recomienda aislar las zonas de la casa que se pretenden enfriar.
El aislamiento de la vivienda es otro de los puntos muy importantes debido a que evitar las fugas de aire o que entre el calor del exterior permite un ahorro energético de hasta un 30%.
Una alternativa más económica conocida por todos es el ventilador. En este sentido, es cierto que consume mucha menos electricidad que los aires acondicionados, pero la realidad es que no enfría el ambiente, sino que solo mueve el aire. Como no climatiza, los expertos recomiendan tener en cuenta la temperatura real de la estancia y valorar encender el aire acondicionado para evitar golpes de calor.
Otro truco para evitar poner el aire acondicionado, o si no se tiene este electrodoméstico en casa, es el de pulverizar un poco el ambiente, lo que favorece que la sensación térmica sea menor al estar más húmedo. De hecho, algunos ventiladores ya incluyen la opción de incluir agua con este objetivo.
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