PRECIOS MÁS BAJOS
Un 70% de las personas encuestadas opina que las marcas blancas tienen igual o mayor calidad que las primeras marcas. En vista de estos datos podríamos preguntarnos si realmente los empresarios y consumidores confían en las marcas blancas más allá de las cifras publicadas.
Niklas Gustafson, empresario sueco, y fundador de conZumo, quien desde hace 15 años reside en España, decidió hace ocho creer en el potencial de este país y crear conZumo, una empresa dedicada a la venta de productos informáticos por Internet a empresas y profesionales, y líder en este sector.
Gustafson considera que "España es un país privilegiado para los negocios gracias al buen clima, la gastronomía y la situación geográfica entre otros muchos factores", factores que le han impulsado a crear su empresa a través de la que se distribuye su marca, que bien puede ser considerada una marca blanca.
Según declaraciones del fundador de conZumo.com, estas cifras demuestran claramente que ahora se compran más consumibles de marca blanca que antes: "Creemos que esto puede ser porque ha cambiado la percepción de que un producto sin marca no puede ofrecer la misma calidad que uno que sí la tenga"; y añade: "Casi un 70% de nuestros pedidos son de nuestra marca blanca, conZumo".
El mercado de consumibles de marca blanca está en alza y cada vez son más los usuarios que se deciden adquirir estos productos, convirtiéndose en fieles consumidores una vez que atestiguan que su calidad y sus resultados son iguales que los de las grandes marcas.
Al hablar de marca blanca, por asociación, tenemos que hablar de confianza, de la confianza que implica invertir en un producto del que no se tienen referencias o resultados ampliamente contrastados.
Lo que nos lleva a las cifras publicadas el pasado 30 de julio sobre el Indicador del Sentimiento Económico (ISE), elaborado por la Comisión Europea, que mide la confianza de los inversores y consumidores en la Unión Europea; concretamente en España, subió 1,2 puntos y alcanzó los 93,5 puntos, presentando una mejora considerable de un dato de interés de cara a la inversión tanto de empresarios (pymes) respecto a la creación de marcas blancas, como de consumidores en cuanto a la decisión de compra de marcas blancas.