HA AFIRMADO QUE LA "RESPONSABILIDAD DIRECTA" DE LA CONVOCATORIA RECAE SOBRE EL GOBIERNO
El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha presentado esta mañana, en un trámite obligatorio antes de registrar la huelga en el Ministerio de Trabajo, la convocatoria de huelga general para el 14 de noviembre, instando a Mariano Rajoy a que "aprovecche de forma inteligente" el paro general para presionar en Europa.
Méndez ha resaltado también que la huelga general del 14 de noviembre está "absolutamente llena de sentido" y que la "responsabilidad directa" de la convocatoria recae sobre el Ejecutivo que, según ha dicho, está encaminando al país al desastre "social y económico".
En declaraciones a los medios antes de participar en la asamblea de delegados de UGT en Madrid, Méndez ha acusado al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de adoptar una posición de "debilidad con Berlín y de prepotencia y dureza con los ciudadanos españoles". "El presidente (del Gobierno) debería entender la huelga como una oportunidad para modificar su política", ha aseverado.
Además, le ha emplazado a comprometerse "desde hoy" a convocar una consulta popular sobre los recortes y le ha sugerido que la haga coincidir con las elecciones catalanas del 25 de noviembre. "Si el pueblo le da la razón a Rajoy pues lo sabremos y tendremos que atenernos", ha recalcado.
Méndez ha dicho que espera que la huelga general sea "más que una protesta laboral" y también adopte un carácter "cívico". En su opinión, el exponente más claro del "desastre" son los presupuestos generales de 2013, que ha calificado como el "hachazo mas duro que se ha propinado a los derechos sociales, a los servicios públicos, y a las posibilidades de generar empleo de toda la historia de la democracia". En este sentido, ha acusado al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, de "manipular" al afirmar que las cuentas públicas son "las más sociales".
Por su parte, el secretario general de UGT Madrid, José Ricardo Martínez, ha resaltado que los trabajadores "están deseando" no tener que manifestarse y protestar, pero para eso el Gobierno de la Comunidad de Madrid tiene que dejar de "agredir" a los trabajadores y el Gobierno de España de "legislar contra la ciudadanía".