SEGUNDA HUELGA POR LA EDUCACIÓN PÚBLICA
El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha pedido a Gobierno central, ante la huelga de educación de este jueves, la retirada de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) y que inicie "un proceso se negociación real" con la comunidad educativa.
Así lo ha indicado este jueves, en declaraciones a los medios de comunicación, antes de participar en el 6º Congreso Región de UGT-Aragón, con el lema 'Unión, Trabajo y Solidaridad', que se celebra en la Residencia 'Escolar Pignatelli' de Zaragoza. Cándido Méndez ha relatado que el ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, ha mantenido "diálogo" con el sector, pero no ha realizado un "proceso de negociación real", por lo que ha pedido que se retire la nueva norma que "significa una vuelta al pasado". También ha considerado que "el impacto" de la huelga educativa, convocada por la Plataforma por la Escuela Pública y que para Méndez está "cargada de razón, "va a ser un segundo varapalo democrático".
Por ello, se tiene que "reiniciar" el proceso se negociación. El primer "varapalo", ha añadido, ha sido el informe del Consejo de Estado sobre la reforma educativa del Gobierno, hecho público en abril y en el que se censuran algunos de los aspectos de la norma, como la retirada de la asignatura Educación para la Ciudadanía. El secretario general de UGT ha reconocido que este documento "no es vinculante" pero ha criticado que el Ejecutivo ha hecho "oídos sordos" a la opinión del Consejo que "pone patas arriba a la LOMCE".
Clamor de la comunidad educativa
"El Gobierno debería entender el clamor, hoy hay una huelga de los trabajadores de la enseñanza, pero es toda la comunidad educativa la que está en pie en contra de esta norma, porque es una vuelta al pasado en algo fundamental", ha aseverado Cándido Méndez. Asimismo, ha opinado que de la normativa en educación es de donde "debe partir la garantía para que podamos tener un futuro digno en nuestro país". En este contexto, ha agregado, es "muy importante" que el Gobierno "deje de mirar al pasado, que es lo que significa la LOMCE, un pasado muy problemático, y, junto con la comunidad educativa, mire al futuro, abriendo una negociación para, una vez retirado este desvarío --en referencia a la reforma del Ejecutivo--, se asegure el futuro de la enseñanza pública".