LA PEOR CIFRA DE LOS ÚLTIMOS CUATRO AÑOS
En los hoteles es el termómetro del verano. Cada año la Semana Santa pone a prueba sus previsiones para el resto del año. Desde 2009, y hasta hoy, las maletas definían estas vacaciones en la costa o en el interior. Pero el sector teme que esta vez la cifra de ocupación sea la peor de los últimos cuatro años. Dos datos lo anticipan: la mitad de los hoteles ni siquiera abrirá sus puertas y las reservas han caído un 25 %.
Este dato se confirma en las agencias, donde llegan clientes y miran precios, pero no confirman las reservas. Para los que se van, la estancia media sigue en 3-4 días, pero se calcula que gastarán un 40 % menos. Por eso, en los hoteles confían en las llamadas de última hora para salvar la Semana Santa. Asimismo, en zonas como Valencia o Canarias, hoteleros y hosteleros juegan la carta del turista extranjero.
Pero además, la ocupación en estas fechas depende del bolsillo y también del tiempo. Por eso, en los hoteles y restaurantes arreglan mesas y preparan las terrazas con la vista puesta en el cielo.