Reunión de su Consejo de Gobierno
El Banco Central Europeo (BCE) mantuvo el tipo de interés al que presta a los bancos a una semana en el 0 % y el final de las compras de deuda a finales de este año. Tras la reunión de su Consejo de Gobierno, el BCE informó de que continuará cobrando a los bancos un 0,4 % por el exceso de sus reservas a un día (facilidad marginal de depósito) y que les seguirá prestando a un día al 0,25 % (facilidad marginal de crédito).
El presidente del BCE, Mario Draghi, se mostró hoy algo más optimista respecto al crecimiento y la inflación de la zona euro, si bien advirtió de que se mantiene la incertidumbre ante el auge del proteccionismo comercial. Tras la reunión del Consejo de Gobierno, Draghi calificó de "buena señal" el acuerdo entre el presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, y el presidente de EEUU, Donald Trump, porque muestra "la disposición a discutir asuntos de comercio en un entorno multilateral". No obstante, en rueda de prensa en la sede de la entidad, Draghi consideró que "es demasiado pronto para valorar el contenido del acuerdo", ya que no conocen los detalles en profundidad.
El presidente del BCE hizo hincapié en que el crecimiento económico de la zona del euro es "sólido y amplio", pese a la incertidumbre en el entorno comercial global, y que la política monetaria expansiva actual asegurará que la inflación suba hasta algo por debajo del 2 %, incluso cuando dejen de comprar deuda. El BCE reconoce que "los últimos indicadores económicos y los resultados de las encuestas de confianza se han estabilizado y apuntan a un crecimiento económico sólido y amplio". En la reunión anterior en junio, el BCE destacó que el ritmo de crecimiento se había debilitado.
El BCE también espera que la inflación subyacente, que descuenta los elementos más volátiles como la energía y los alimentos frescos, repunte a finales de año. El banquero italiano explicó que el Consejo de Gobierno no ha discutido en la reunión de hoy la reinversión de los bonos adquiridos que venzan. Aunque a algunos participantes del mercado les hubiera gustado oír detalles del programa de reinversión de los bonos, Draghi se ha limitado a decir que la cuota de capital de cada banco central nacional en el BCE será también el pilar para realizar las reinversiones, como lo fue al comprar los bonos.
La entidad monetaria europea ha comprado desde marzo de 2015 deuda soberana en la misma proporción a la participación de cada banco central nacional de la zona del euro en el capital del BCE. La cuota de capital del Bundesbank en el BCE es del 25,7 %, del Banco de Francia del 20,3 %, de la Banca d'Italia del 17,6 %, del Banco de España del 12,6 % y del Nederlandsche Bank de Holanda del 5,7 % El BCE va a reducir a la mitad las compras de deuda pública y privada en el cuarto trimestre, hasta 15.000 millones de euros mensuales, y las va a concluir a finales de diciembre, cuando habrá adquirido bonos por valor de 2,6 billones de euros.
El BCE ha reiterado que mantendrá el precio del dinero hasta, al menos, durante el verano de 2019. De este modo el BCE se compromete a no incrementar los tipos de interés hasta entonces para garantizar que la inflación sube y que el crecimiento continúe en un momento de incertidumbre por factores geopolíticos como el proteccionismo en el comercio. El continua cobrando a los bancos un 0,4 % por el exceso de sus reservas a un día y cuando comience a subir los tipos de interés lo hará primero por esta tasa de interés a los depósitos bancarios.
Draghi tampoco ha dado esta vez más detalles sobre esa fecha, que algunos expertos consideran que podría ser en septiembre de 2019, sino que ha dejado entrever que el BCE prefiere mantener la flexibilidad para poder reaccionar en caso de que la situación económica empeore o suban los tipos de interés en el mercado de capital.