LO ADVIERTE LA ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE LA BANCA
"Esto no será fácil ni pacífico, como tampoco lo es en el ámbito de la prensa o de las creaciones intelectuales en cine, música o literatura", ha reconocido durante su intervención en el XXIII Encuentro del sector financiero.
Desde su punto de vista, dentro de diez años el cobro de los servicios prestados por la banca "será norma, por mucho que, de momento, las estrategias comerciales de atracción de clientes basadas en la gratuidad de las comisiones sigan formando parte de las herramientas de diferenciación de algunas entidades que necesitan reforzar su atractivo en el corto plazo".
Roldán entiende que pagando por los servicios se podrá comparar entre los distintos proveedores, "probablemente no todos bancarios", para decidir cuál le ofrece mejor calidad al menor coste.
En este sentido, ha insistido en que el negocio bancario se centra en la financiación y en la transformación de plazos, pero las entidades ofrecen, además, una serie de servicios auxiliares, como servicios de pago o custodia de valores, "en los que el usuario aprecia especialmente la seguridad que le ofrece la intervención de su banco en cualquier transacción".
"Este factor de seguridad y de confianza del cliente en su banco constituye un elemento competitivo de primer orden a favor de las entidades bancarias y en detrimento de los nuevos operadores digitales que puedan surgir en estos ámbitos", ha adelantado.
Echando la vista atrás, el presidente de la AEB ha recordado que, en el pasado, el coste de esos servicios para los bancos se subsumía en otros costes y se recuperaba en los márgenes de intereses. "Aunque el cliente no era consciente del coste que tenía para el banco la oferta de estos servicios, ello se compensaba porque esta aparente gratuidad constituía un elemento comercial muy potente", ha indicado.