Pescado
Un estudio de la Universidad de Santiago certifica los beneficios de la reducción de la recaudación fiscal
Que el consumo de pescado ha descendido notablemente en los últimos años es un hecho. Que se cifra en una bajada de hasta un 30% en una década, también lo conocemos. Y, ahora, un grupo de investigadores de la Universidad de Santiago, a través de un estudio, explican qué supondría para la economía reducir el IVA de este producto.
"Es un producto muy estructural con lo cual, a mayor precio, menor es el consumo; y con un coste más bajo, las ventas se incrementarían", explica Gonzalo Rodríguez, economista. Parece obvio y, sobre todo, beneficioso para la economía.
Pero este estudio va más allá y sostiene que, en el mejor de los casos, si el IVA se redujese de un 10% a un 5%, se crearían más de 5.500 empleos solo en Galicia. "El sector del mar tira de muchos oficios diferentes: rederos, astilleros, juristas, conserveras y decenas de trabajos más de “muy diferentes sectores, enumera Gonzalo Rodríguez.
Al aumento del consumo de pescado y a la creación de nuevos empleos, se le añadiría también una mejora de la dieta, que se convertiría en más saludable, al poder consumir productos de mar con mayor asiduidad.
En los últimos años la compra de pescado, por persona y año, en los hogares españoles se ha desplomado, hasta menos de 19 kilos en todo el país y de 24 en la comunidad gallega.
Y este cambio en la dieta se percibe en los mercados. En la plaza de abastos de Santiago explican que los clientes han modificado sus hábitos. "Antes se comía pescado 4 veces a la semana, al menos, y ahora los clientes compran para un par de días o para tres como máximo", dice Manuel desde su puesto de productos del mar.
Los consumidores a los que preguntamos también coinciden en que, en menor o mayor medida, han reducido la ingesta de pescado. "Yo en un 70%, no exagero, es que no se puede comprar de lo caro que está", dice una turista sevillana de visita en el mercado.
Este grupo de economistas de la Universidad de Santiago coinciden en que en los países en los que se ha aplicado la reducción del IVA en el pescado han conseguido incrementar su consumo, mejorar la dieta de los ciudadanos y crear nuevos empleos. Creen, por tanto, que habría que acercarse al modelo de Francia, en donde el IVA se cifra en un 5,5%, de Alemania, con un 7% o de Italia, en donde se reduce a un 4%.