Precio de la gasolina
Con la llegada del precio de la luz a máximos históricos, viene la subida del precio de la gasolina y se dispara un 21% respecto a las cifras del año pasado.
Rellenar el depósito también encarecerá las facturas de los españoles ya que los carburantes están alcanzado precios muy elevados que se suman a los precios históricos que ha alcanzado la luz en los últimos días. Tanto es así, que respecto al año pasado, la gasolina cuesta un 21% más.
A pesar de que en la última jornada el precio de la luz ha bajado en cantidades mínimas, continúa en máximos históricos. Los españoles siguen pagando la electricidad por encima de los 100 euros el megavatio por hora, aunque un 5% menos que ayer, miércoles 21 de julio, que alcanzó cifras muy elevadas, que incluso superaron al que marcó la luz el 11 de enero de 2002, con 103,76 euros.
El precio de la gasolina aumenta más de un 20%
Con la llegada del verano y la operación salida 2021, muchos planean salir de sus residencias y disfrutar de sus vacaciones. Sin embargo, este verano llenar el depósito cuesta de media 12 euros más que el año pasado: ya supera en un 21% a las cifras de 2020. De esta forma, España continúa estando entre los países de Europa que tienen los precios de relleno del depósito más caros, a lo que se suma el precio del gas, del butano y también de la gasolina.
Si los destinos de viajes de los turistas se encuentran dentro de la Península, muchos optarán por el uso del coche como medio de transporte, aunque a la hora de barajar opciones, puede que salga más rentable un billete de avión, tren o incluso hacer uso del transporte público para desplazarse de un lugar a otro. Todo ello como consecuencia de la subida de la carga del coche de gasolina en más de un 20%, hasta llegar a cifras inimaginables que no se veían desde hace siete años.
Actualmente, la gasolina alcanza un precio aproximado de 1,40 euros el litro y el diésel ya llega a rozar una cantidad de 1,30 euros el litro. Y este aumento disparado de la gasolina se une a la subida de precios de la electricidad.
Por ello, parecería apropiado que los españoles opten por otras elecciones como avión, tren o transporte marítimo atendiendo a las preferencias, los destinos y la rentabilidad que le suponga a cada uno de los viajeros.