Festivales de música
El Festival Sonorama en Aranda de Duero está supervisado por un amplio dispositivo, con 160 agentes, el más completo de las 26 ediciones.
Aranda del Duero espera recibir hasta el domingo 120.000 personas. El 60% del público asistente es menor de 30 años.
Está localidad multiplica por dos sus habitantes durante el festival tanto en las calles y plazas del centro como en el recinto.
Todo supervisado por un amplio dispositivo, con 160 agentes, el más completo de las 26 ediciones. Las patrullas vigilan a pie y desde el aire con drones y el helicóptero. "Se trata de que las 45.000 personas que nos acompañan cada día, multiplicando la población, necesitamos refuerzos para garantizar el orden público seguridad de los asistentes", explica Joaquín Gomá, jefe de Policía Nacional en la Comisaría de Aranda de Duero.
La Unidad de Caballería de la brigada de Madrid forma parte del dispositivo y se sitúa en las calles aledañas al centro de la localidad donde más gente se acumula por los conciertos. Hacen la función de puertas para evitar aglomeraciones.
Durante cinco días, la música suena en cada rincón de la localidad burgalesa, dejando un gran impacto económico. "Son más de 14 millones de euros los que dejó la edición pasada se van a superar. Impacta en hostelería, es un autentico pulmón económico para una comarca rural", detalla Rebeca Ruano, responsable de Comunico de Sonorama Ribera.
Hasta 125.000 personas pasarán por el festival generando más de 1.500 puestos de trabajo directos y eso lo notan en los negocios como bares y restaurantes que tienen que duplicar los recursos. "Por el día, por la noche, siempre hay algo que hacer, es muy cansado pero muy bien", dicen alguno de los asistentes.
Con los alojamientos completos, con el camping como una de las opciones más económicas. "Al final éramos varios y al ser un festival es lo más barato que viene unido a la entrada y por 20 euros más la tienes", nos cuentan.