Vivienda
La Ley de Vivienda no funciona en Cataluña, es la única Comunidad Autónoma de las 17 que ya ha puesto en marcha el plan del Gobierno para combatir el problema habitacional en nuestro país y los resultados no son positivos. Los precios se han disparado y cada vez hay menos opciones donde elegir.
Cataluña fue la primera en dar el paso, la primera autonomía que se atrevió a poner en marcha la Ley de Vivienda para conseguir frenar la escalada de precios del alquiler en zonas tensionadas. Y de momento es la única, y el balance no es bueno. Después de un año de aplicación los precios han subido y las opciones para alquiler son menores que antes. Otras autonomías se plantean iniciar la aplicación de la Ley de Vivienda pero aún no se atreven. Solo Asturias, Navarra y País Vasco se plantean aplicarla. Según Francisco Iñareta, analista del portal inmobiliario Idealista, los resultados son muy negativos: "los resultados han sido desastrosos para el mercado, frente a 2019 la oferta disponible se ha reducido un 65% en la ciudad de Barcelona, se ha multiplicado por siete el número de familias que compiten por cada vivienda y el precio ha crecido un 33%".
La clave para entender la subida de precios reside en cómo funciona la norma. Se establecen una serie de restricciones para los propietarios en las zonas tensionadas. Lo que han hecho muchos ha sido cambiar el tipo de alquiler, pasando de ofrecer un alquiler tradicional o un alquiler temporal, algo que permite esquivar la Ley de Vivienda. Así los propietarios prefieren ahora alquilar sus casas a estudiantes de forma temporal de septiembre a junio y dejar los pisos vacíos en verano, de tal forma que esquiven a la ley. Así el número de viviendas de alquiler tradicional se ha reducido drásticamente, y al no haber suficiente alquiler tradicional, las familias se tienen que pelear más por conseguir cada vivienda. Menos vivienda, más personas interesadas, lleva a una subida automática de precios que hace que solo las rentas más altas puedan acceder al alquiler en las grandes ciudades como Barcelona.
En Cataluña hay 271 municipios con zonas tensionadas, es gran parte del territorio catalán, de hecho el 90% de la población de Cataluña vive en zonas tensionas, es una de las claves de la Ley de Vivienda.
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