Estafa
Los productos calificados como 'premium' han proliferando en todos los sectores, desde la alimentación hasta tecnología o la moda. Pensamos que esa etiqueta nos da un producto de mayor calidad, pero no es así en todos los casos.
En los últimos tiempos se ha detectado una avalancha de productos de todo tipo que llevan el calificativo de 'premium'. Esta palabra en la etiqueta significa que vamos a pagar más porque entendemos que el producto o servicio que se adquiere es de mayor calidad.
Hablamos con Jorge Oria, abogado de Clarke Modet, experto en marcas y patentes: "Hemos advertido que el uso de estas denominaciones pueden generar confusiones en los consumidores. Se puede etiquetar como 'premium' a productos de todo tipo, como tecnología, papel, telas, bolígrafos....si bien es cierto que lo que más predominan son los alimentos y bebidas, es el porcentaje más alto con esta denominación".
Según la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM), actualmente hay 1.327 marcas que contienen el calificativo de 'premium', entre estas marcas se registran 448 alimentos y bebidas. Ahora el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha decidido tomar cartas en el asunto y ejercer un mayor control. Se prevé poner en marcha inspecciones y sanciones para los empresarios que no cumplan con los requisitos que se exigen con el etiquetado y el control de calidad. La cuantía de estas multas dependerá de la comunidad autónoma, por ejemplo en Canarias se ha fijado un mínimo de 15.000 euros, en Andalucía 60.000 euros y en Cataluña y País Vasco pueden llegar a pagar una multa de 100.000 euros por etiquetas que lleven a confusión o engaño al consumidor.
Oria advierte: "Los etiquetados incorrectos están sujetos a multas administrativas, y además tendrán que proceder a la retirada de esa etiqueta y a la sustitución por otra que no incluya el término".
Lo llamativo es que en muchas ocasiones el consumidor no es capaz de distinguir entre un producto básico y otro premium, así lo reconoce el experto en marcas y patentes: "El consumidor no es capaz de percibir la diferencia, con lo cual si no tiene un elemento de referencia puede haber un efecto confusionario, y creyendo que está recibiendo un producto superior, en realidad es el mismo. El etiquetado 'premium' da ese ámbito de alta calidad y atractivo que hace que el consumidor lo adquiera"
El abogado matiza que no se puede generalizar, porque los productos 'premium' claro que existen: "Una decisión generalizada de prohibir el uso de 'premium' en el etiquetado podría no ser del todo justa o acorde a derecho. Por eso hay que analizar caso por caso porque puede haber supuestos en los que esté más que justificado utilizar ese término".
Importante a tener en cuenta cuando vamos a comprar: "Que se especifiquen datos de aclaración en la etiqueta sobre ese producto calificado como 'premium' y, si es así, el riesgo de llevarnos a engaño se minimiza".
Oria insiste en la importancia de "ser más cuidadosos a partir de ahora, y precavidos a la hora de hacer una buena política marcaria y de propiedad intelectual industrial, así como cumplir con los requisitos de un perfecto etiquetado".
Los consejos a seguir son: "Valorar si el producto se puede comparar a otro producto de menor calidad o menores prestaciones, estudiar qué ventajas nos da ese producto 'premium' con respecto a otro, ver si merece la pena ese plus en el precio y no caer en el atractivo fácil de que por el mero hecho de que lleve 'premium' considerar que es ventajoso con respecto al que no tiene este calificativo.