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Cesta de la compra

Los agricultores y ganaderos temen arruinarse si el acuerdo de Yolanda Díaz sigue adelante

Muchos ganaderos han tenido que sacrificar a sus animales en pleno rendimiento de producción porque no pueden hacer frente a los costes.

La situación de los ganaderos es desesperada y ya se prevé un otoño complicado para el sector lácteo. El precio que recaudan por la leche no es suficiente para cubrir los costes, el del pasto se ha incrementado un 150% en el último año y la factura de la luz también se ha incrementado más del doble en los últimos meses. Esto ha provocado que muchos se estén replanteando abandonar el oficio.

Muchos ganaderos del sector lácteo se ven obligados a sacrificar a sus vacas en pleno rendimiento de producción porque no pueden soportar los costes debido a la subida de precios en la alimentación. La alimentación de los animales les supone un 80% del coste total de la explotación, pero a los gastos también hay que añadirles la energía y los sueldos. El litro de leche se paga a los ganaderos por menos de 50 céntimos, un precio por debajo del coste, lo que hace que se convierta en un negocio inviable para ellos.

Los últimos estudios indican que, de media, dos granjas cierran cada día en nuestro país y, en lo que va de año, ya se han producido 30.000 toneladas menos de leche que en años anteriores. Esto podría provocar una escasez del producto y por tanto, un subida en su precio que, de no mejorar su situación, lo convertiría en un lujo en los supermercados.

Los agricultores y ganaderos temen que la bajada de precios les perjudique directamente a ellos

La inflación sigue subiendo y llenar la nevera es cada vez más caro. En este contexto, el Gobierno continúa estudiando la propuesta de la vicepresidenta, Yolanda Díaz, para fijar los precios de los alimentos básicos de la cesta de la compra. Díaz pretende llegar a un acuerdo que permita limitar los precios máximos de una serie de 20 o 30 productos básicos. Lo hará en un reunión con nueve asociaciones de consumidores y tres grandes asociaciones de distribuidoras que representan los intereses de empresas como Mercadona, El Corte Inglés, Día o Lidl.

Por su parte, los agricultores y ganaderos temen arruinarse si este acuerdo sigue adelante. Les preocupa que esta bajada de precios les castigue directamente a ellos y que terminen pagando las consecuencias. Algunos ya han empezado a sacrificar parte del ganado para hacer frente al aumento de costes. Mientras tanto, la vicepresidenta continuará reuniéndose con las grandes distribuidoras para proponerles su plan.

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