No quieren que el avión se convierta en una taberna
Cada vez son más comunes los casos de pasajeros bebidos causando incidentes en la cabina de un avión. Hace unas semanas, el pasaje de un vuelo de Ryanair con trayecto Escocia Ibiza vivió una auténtica pesadilla.
Unos treinta jóvenes en estado de ebriedad protagonizaron varias peleas e insultaron al resto de los pasajeros durante el vuelo por lo que agentes de la Guardia Civil tuvo que detener a cinco de ellos; incautando diez botellas de Vodka como prueba.
En otra ocasión, en un vuelo de Islandia a Nueva York, un pasajero borracho tuvo que ser amordazado y atado al asiento por algunos viajeros.
Ya hay compañías que quieren evitar este tipo de situaciones, de hecho, según la prensa irlandesa, Aer Lingus ha implantado la ley seca en el trayecto Dublín-Ibiza. La aerolínea registrará a los pasajeros para evitar que suban al avión botellas de alcohol de las tiendas libres de impuestos.
Según la aerolínea, los jóvenes ya embarcados comienzan a beber a un precio de seis euros por copa y, tras las tres horas de vuelo, llegan a la isla de Ibiza.
La compra en el duty free en España está limitada y sólo se puede embarcar en el equipaje de mano una botella de alcohol o dos botellas de vino.