Vivienda
Los vecinos denuncian que no pueden asumir los gastos que les piden por arreglarlo y el Ayuntamiento dice que trabaja por encontrar una solución.
Desde hace un año casi una decena de familias de Hospitalet de Llobregat, en Barcelona, viven con sus casas apuntaladas. Tienen sus pisos apuntalados por peligro de derrumbe. El edificio tiene 65 años, está en muy mal estado. Denuncian que no pueden asumir los 200.000 euros que les piden para arreglarlo.
A sus 91 años Pilar hace verdaderas acrobacias para poder cocinar. Su cocina está apuntalada y tiene hasta 6 postes. Para cocinar, se tiene que subir a un tablón. Pilar explica que se tiene que agarrar a veces para poder ir dando la vuelta a la comida. Y así está toda su casa. Pilar define el estado de su hogar como "una pesadilla". En la vivienda de Mercedes, la situación es la misma. "Me molesta porque tengo miedo de caerme", explica esta vecina que también es mayor y también se tiene que agarrar a los postes para hacer algunas actividades diarias.
No pueden asumir el coste
Estos vecinos de Hospitalet, en Barcelona, llevan años con su casa apuntalada por riesgo de derrumbe. "Existe un riesgo grave inminente de derrumbe", cuentan. Y mientras, esperan con miedo a que ceda el techo en cualquier momento. La reparación asciende a 200.000 euros, 20.000 por vivienda.
El Ayuntamiento argumenta que están trabajando para buscar una solución, pero los vecinos se sienten abandonados y apenas pueden hacer nada en sus casas. "Llevamos un año y medio esperando el segundo estudio y nadie sabe nada", explica una vecina. Solo quieren volver, dicen, a estar seguros en su propia casa y que lo único que se apuntale sea el problema.