MARGA CRESPÍ, UNA DE LAS AFECTADAS
Marga Crespí sufrió en su ámbito personal, pero también dentro de la piscina. Y es que un grupo de nadadoras denunciaron los métodos de Anna Tarrés, exseleccionadora de sincronizada que les decía frases inadmisibles mientras entrenaban.
Ana Violán, una de las nadadoras denunciantes, afirma que el método de Tarrés "destrozaba sueños e ilusiones". "Iba nerviosa, lloraba... Te llegas a plantear si de verdad quieres ir".
Además, todas denuncian que Tarrés les hacía firmar contratos publicitarios bajo amenaza de una expulsión del equipo. "Si no firmábamos había represalias". Una vida nada sencilla para una medallista olímpica.