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Dominó durante 90 de las 100 vueltas del Chevrolet Detroit Grand Prix y firmó su segunda victoria de la temporada, confirmándose como serio aspirante para hacerse con el campeonato de la IndyCar.
Álex Palou, quien logró hace unos días una histórica pole en las 500 Millas de Indianápolis, sigue lanzado hacia la conquista de la Indycar. Fue capaz de salir ileso de los diferentes altercados en un accidentado Gran Premio de Detroit para terminar con la que es su segunda victoria de esta temporada, tras la que logró en el Gran Premio de Indianápolis. La carrera empezaba a trompicones desde el principio, los pilotos que formaban el pelotón de mitad de parrilla no lograron agruparse a tiempo y eso obligó a desplegar las primeras banderas amarillas de la jornada.
Aún sin la carrera comenzada, la vuelta lanzada tuvo que repetirse. Pero ese no sería el único incidente de la carrera. De hecho, en la primera curva, el británico Callum Ilott golpeó con la parte delantera de su coche contra el Andretti de Kyle Kirkwood, siendo el primer coche en abandonar la sesión.
"Honda nos dio todo lo que necesitábamos, todo el poder, las ruedas también mantuvieron bien la temperatura. Estoy muy orgulloso", analizó Palou sobre la carrera urbana de Detroit.
Álex Palou, líder con 51 puntos de ventaja sobre Marcus Ericsson
Los muros del circuito fueron protagonistas de varios accidentes en los que Alex Palou no estuvo involucrado, de hecho ni se acercó, en una carrera muy plácida para él. Dominó durante 90 de las 100 vueltas que tiene la sesión, sin dar opción a que ningún piloto pudiera arrebatarle el primer puesto. Sólo el australiano Will Power trató de adelantarlo a falta de 10 vueltas para el final, una idea que le costó muy cara. Una gran defensa de Álex Palou lo dejó sin opciones de adelantamiento y además provocó que perdiese tiempo y posiciones.
"Es muy temprano para imaginar la clasificación final, tenemos que mantenernos concentrados en las próximas carreras y seguir empujando"
Otra gran actuación de Álex Palou que lo hace más líder del mundial de la IndyCar con 273 puntos en la general,aumentando su diferencia con Marcus Ericsson hasta los 51 puntos. Un colchón que permite empezar a pensar que el español pueda terminar coronándose campeón esta temporada, aunque él no quiera pensar en eso por el momento: "Es muy temprano para imaginar la clasificación final, tenemos que mantenernos concentrados en las próximas carreras y seguir empujando".
El que a su vez es tercer piloto de McLaren en la Fórmula 1 está demostrando un gran nivel y que es capaz de sacar el máximo de su coche en cualquier situación. Y pese a que quedan carreras por delante, esta nueva victoria lo confirma como favorito para terminar como campeón de la Indycar.