Aventura
Un golpe inesperado de viento, y un cable invisible, provocan ocho horas de angustia para un parapentista colombiano parapentista colgado.
"Muy difícil identificar el cable del pararrayos", explica Julián Franco, el parapentista colombiano.
Su parapente queda enredado entre cables de telecomunicaciones y alta tensión. Comienza así el rescate.
Llega la policía y los bomberos, que comienzan a trabajar en un plan de rescate. Tienen que llamar a la compañía eléctrica para que quite la potencia en esa zona.
Dos bomberos se encargan de esta difícil tarea: asegurar al deportista con una cuerda, y comenzar desenredar el parapente. Mas de 7 horas después, comienza la fase critica.
Poco a poco los equipos de rescate logran bajar al parapentista. Estaba colgado a 150 metros del suelo. Unas cuantas magulladuras, y mucho cansancio.
"Estoy un poco cansado después de más de ocho horas", aseguró el parapentista mientras era trasladado en camilla tras su rescate.
Es lo único que ha tenido que lamentar, tras ocho horas colgado de una torre de alta tensión.