Maratón
Así es la Tunnel Ultra en Reino Unido, la carrera más agobiante del mundo. El límite son 55 horas, los abandonos llegan al 95% y la exigencia mental provoca alucinaciones en los participantes.
Una vía ferroviaria en desuso es el escenario de la ultramaratón más oscura del mundo. El reto es recorrer 200 veces el Combe Down Tunnel situado cerca de la ciudad inglesa de Bath, de una milla distancia milla. con un tiempo máximo de 55 horas para terminar. En total, 321 kilómetros sin ver más que la luz de los frontales de los participantes.
La Tunnel Ultra, nombre oficial de la carrera estrenada en 2019, se celebró del pasado 31 de marzo al 2 de abril. "Es un zigzagueante test mental de extrema resistencia y privación sensorial", tal y como describe la propia web de la competición. Después de tres días, solo cinco personas finalizaron las 200 idas y vueltas en el Combe Down, el túnel peatonal más grande del Reino Unido.
David Hardey, ganador de este año, tardó 48 horas y 47 minutos. "No sabía que estaba haciendo realmente", contó a la BBC. El británico reveló: "La primera noche la pasé bien, pero en la segunda ya empezaron las juegos psicológicos". Su cabeza le hizo creer que veía "caras de personas en las paredes mientras animaban y estaban sentadas a mi lado". Em esta misma edición, Agnieszka Kaminska hizo el récord femenino con 50 horas y 5 minutos.
Un 95% no termina
Un 95% de los corredores no es capaz de terminar. Es más, un participante de una edición anterior se quedó ciego durante un tiempo hasta que pudo recuperar la vista. Y muchos de ellos sufren alucinaciones por la exigencia mental. "Mientras corría vi una babosa fumando un cigarro mientras se acercaba a mí. Nunca he tomado drogas, pero la sensación creo que puede ser la misma", reconoció un corredor.
Aparte de la dureza de los 321 kilómetros, la organización condiciona a los participantes. De once de la noche a cinco de la mañana, se apaga la luz del túnel y los corredores sólo cuentan con frontales. El resto de horas se ilumina con una luz tenue. Están prohibidos los auriculares, cualquier ayuda desde el exterior y es obligatorio llevar el teléfono móvil y un silbato.
Requisitos para participar
La magnitud del reto es de tal calibre que la inscripción cuenta con ciertos requisitos. Es necesario haber finalizado pruebas de más de 160 kilómetros . Además, económicamente también es exigente puesto que la cuota es de 284 euros.
Mark Cockbain fue el ideólogo del Tunnel Ultra. Una persona a la que le fascina llevar al límite la capacidad física y mental: "Me gustan la cosas que tienen un factor X. Tan pronto como obtuve el permiso para usar el túnel, ni me lo pensé". Sus problemas de rodillas le retiraron en 2011 y desde entonces se dedica a organizar este tipo de eventos. Para él, la cabeza es fundamental: "Si la duda te invade, te vas".