Open de Australia (7-5, 6-2, 6-2)
Open de Australia (7-5, 6-2, 6-2)
El Big Three sigue siendo imbatible. Por lo menos si nos referimos a las finales de Grand Slam. Parece que la historia nunca acabará. Novak Djokovic ha vuelto a coronarse como campeón del Open de Australia tras ganar a Medvedev, es el 9º título que consigue en estas pistas y el 18º Grand Slam de su carrera, a tan solo 2 de Nadal y Federer.
Al igual que Nadal en Roland Garros y Federer en Wimbledon, Djokovic es el auténtico rey de Australia, 9 finales y 9 títulos, un dato demoledor, aunque sigue algo lejos de los 13 de 13 de Nadal en París.
Sin embargo, parecía que este año Medvedev iba a ponerle las cosas más complicadas al serbio en la gran final, el ruso había ganado 3 de los últimos 4 enfrentamientos y llevaba 20 victorias seguidas. Pero hoy no iba a ser el día, Djokovic se conoce como nadie esta pista y todos y cada uno de los rincones de la Rod Laver, nadie nunca le ha ganado un final aquí y la posibilidad de que algún día ocurra empieza a convertirse en una gesta.
Djokovic, el rey de Australia
Djokovic no ha tenido su torneo más tranquilo ni mucho menos, en segunda ronda se dejó un set contra Tiafoe, en tercera comenzó a acusar los problemas en el costado y llegó a un 5º set contra Fritz que terminó llevándose con rabia y pundonor. Después apenas sufrió contra Raonic y Zverev le puso contra las cuerdas, pero falló en los momentos claves y el serbio se hizo grande, como hace un campeón. En la semifinal cogió ritmo contra Karatsev, la sorpresa del torneo, pero que poco pudo hacer ante Novak, que ya había cogido la velocidad de crucero.
Hoy, en la final, ha arrollado de principio a fin al ruso, que remontó un 0-3 y llegó al 5-5 en el primer set, ese fue el momento en el que más cerca estuvo Medvedev de poner en aprietos al ganador de 18 grandes. El resto fue coser y cantar, Djokovic estuvo impecable, dominó con la derecha, desesperó con el saque y retó a Daniil en una batalla de revés que también se terminó llevando Novak.
Pocas veces habíamos visto a un Medvedev tan desesperado, y no era para menos, Djokovic jugó con él y no le dio ni un respiro durante el partido. El resultado final fue claro y contundente, 7-5, 6-2 y 6-2.
El serbio se lleva algo más de 2.000.000 millones de euros tras ganar el Open de Australia, la misma cantidad que se lleva la campeona femenina, Naomi Osaka.
Djokovic sigue siendo el rey en Australia y se pone a 2 de los 20 grandes de Nadal y Federer. Federer 20, Nadal 20 y Djokovic 18. ¿Alguien da más? La lucha de titanes continúa. Siguiente parada: Roland Garros.