Open de Australia
El español se llevó la primera manga en un tiebreak de infarto y de casi 30 minutos de duración, el más largo de su carrera. El punto definitivo es una locura: "Ha sido de los más locos de mi carrera y me dio la mitad del partido".
Rafa Nadal ha conseguido hoy pasar a los cuartos de final del Open de Australiatras vencer por tres sets al francés Mannarino. El primer set se lo llevó el español en un espectacular tiebreak que define perfectamente lo que es Nadal.
No estaba siendo mejor el español en la primera manga a su rival, había mucha igualdad en pista y se imponían los servicios al resto. Llegó el tiebreak y nadie, ni el propio Nadal, imaginaría como iba a terminar.
La muerte súbita terminó con un 16-14 a favor de Nadal, han leído bien, duró 28 minutos, solo el desempate, el set en su conjunto se fue hasta la hora y 22 minutos. Sin embargo, ambos pudieron llevárselo, Mannarino tuvo 4 bolas de set y el español 6.
La tensión y el espectáculo estaban haciendo vibrar a la Rod Laver, Nadal desperdició hasta 3 bolas de set al servicio y terminó ganando el tiebreak rompiéndole el saque a Mannarino cuando el resultado marcaba 14-15 para el balear.
Un punto que define a Rafa Nadal
El punto fue una auténtica locura que define a la perfección al tenista manacorí. El francés sacó abierto, el resto de Rafa tocó la cinta y Mannarino respondió con una derecha que se quedó corta y a la que llegó de milagro el español para ponerla como pudo en el otro campo, su rival subió a la red con una aproximación y el español muy listo, le adivinó el lado y respondió como pudo con una derecha volea que sorprendió a Mannarino y que este tiró fuera.
La Rod Laver explotó de júbilo y Nadal celebró sacando músculo repetidas veces para terminar pidiendo perdón a su contrincante por la bola que restó y que tocó en la red: "Ha sido uno de los 'tie break' más locos de mi carrera. Ha sido la mitad del partido, sin ninguna duda..", dijo tras el partido. Fue un golpe mortal para su rival y el mallorquín le puso la puntilla con dos mangas perfectas (6-2, 6-2).
Nadal gana y da espectáculo. Puro Rafa. Denis Shapovalov, el siguiente obstáculo en su camino hacia el 21º Grand Slam.