Coronavirus
Novak Djokovic no pierde el buen humor que le caracteriza ni en mitad de la cuarentena por el coronavirus. Y es que a falta de una pista para entrenar, buenas son unas sillas y varios cojines.
De esta forma, el tenista serbio improvisó su particular cancha de tenis en su propia casa para quitarse el mono con una pelota de tenis y una par de palas de padel.
Por lo que se ve en el vídeo, que él mismo ha colgado en sus redes sociales, en esta disciplina tampoco tiene rival.