Guerra en Ucrania
La número 154 del ranking WTA explotó en redes sociales y dio su opinión sobre la guerra ruso-ucraniana.
La jugadora de 23 años ha detallado públicamente su experiencia de joven, cuando vivía en Odesa, Ucrania, y tuvo que abandonar el país por ser rusa cuando era una promesa del tenis.
"Cuento todo desde la primera persona, lo que específicamente yo o mis amigos más cercanos hemos visto. Nos vimos obligados a salir de Ucrania. Según testigos presenciales, las Fuerzas Armadas de Ucrania mataron a gente por hablar ruso. Después del 2 de mayo del 2014 fue imposible llevar la indumentaria de la selección rusa, porque podían dispararte sin contemplaciones", comenzó explicando la tenista.
La número 154 del ranking WTA hizo referencia a la destrucción del puente del estrecho de Kerch, que unía a Rusia y Ucrania: "Dios no les dio cerebro, por desgracia. ¿Por qué están tan contentos? Si quieren recuperar Crimea... romper no es construir", aseguró.
Por último quiso explicar lo que para ella fue un golpe de estado en Ucrania en el año 2014: "No fue de la manera que te han contado... allí hubo protestas masivas y, dicen que el presidente Viktor Yanukovich huyó del país cuando lo que pasó es que le amenazaron de muerte".
La respuesta crítica de Dolgopolov, extenista ucraniano
Las reacciones no han tardado en llegar y ha sido un extenista ucraniano, Aleksandr Dolgopólov (ex nº13 del mundo) el que ha querido lanzar un mensaje en su cuenta de Twitter:
"Cuando el ATP Tour, la WTA y otras autoridades del tenis dicen que ningún jugador ruso apoya el genocidio, es una gran mentira. Gasanova no parecía preocuparse por los asesinatos en masa de Bucha, Mariupol, Izum... Sin embargo, se ofendió mucho porque los ucranianos están felices, que el puente de Kerch, que suministra tanques y armas a Rusia las 24 horas del día, los 7 días de la semana, matando ucranianos, fue destruido. Patético", explicó.