Steve Thompson
En 2003 ganó el Mundial de Rugby, pero hoy no recuerda nada. Steve Thompson sufre demencia precoz y cree que se debe a los golpes que sufrió. Va a demandar a la Federación Internacional de Rugby y si pudiera dar marcha atrás borraría el rugby de su vida para recuperar la memoria.
Steve Thompson tiene demencia precoz con solo 42 años tras haber sido jugador de rugby. Su pérdida memoria lo tiene aterrorizado: "Pienso en si veré crecer a mis hijos, ir a la universidad, bodas y todo eso... estoy en el limbo. Probablemente no lo voy a poder ver".
El largo proceso de esta enfermedad
Steve culpa a la Federación Internacional de Rugby, a la que va a demandar por no haberle protegido de una enfermedad que le va condicionar el resto de su vida: "Esta enfermedad tiene distintas fases. Primero aparecen la confusión, dolores de cabeza y mareos. Luego hay deterioro intelectual progresivo, problemas de convivencia social, ideas de suicidio o agresividad", explica Jaime Masjuan, jefe de Neurología del hospital Ramón y Cajal.
"No recuerdo haber estado ahí"
Su grado de demencia es tan importante ya que ni recuerda el Mundial que ganó con Inglaterra hace 17 años: "Realmente no me acuerdo del Mundial. No me acuerdo de haber estado en Australia. Veo los partidos, estoy en el campo. Pero no me acuerdo de haber estado ahí para nada".
El origen de la enfermedad está en los golpes crónicos repetidos: "Lo que no se sabe es qué cantidad de golpes hay que recibir para producir esta enfermedad", explica Masjuan. Steve tampoco sabe cuántos, pero sí que de haberlo sabido no habría sido jugador de rugby.