Fitness
Empezó a entrenar hace apenas un año, pero ya es el mejor español en esta exigente prueba de fitness que combina running con ejercicios de fuerza.
"No me considero el hombre más fuerte de España, pero en hyrox actualmente puedo decir que lo soy". Rubén Patiño mantiene los pies en el suelo tras convertirse en el mejor español del ranking hyrox, la prueba de moda en el mundo del fitness que combina 8 kilómetros de running y 8 workouts de forma intercalada. Empezó a entrenar específicamente hace menos de un año. Tiempo suficiente para llegar cuarto a la meta en la cita del pasado 18 de marzo en Barcelona, entre 3000 participantes y solo por detrás de un australiano, un francés y el campeón y recordman, el estadounidense Hunter McIntyre.
Las ocho pruebas del circuito, algunas conocidas de disciplinas como el crossfit, incluyen los 1.000 metros en máquina esquí, empujar 50 metros un trineo de 202 kg, otro con 175, 80 metros de burpees (flexiones, sentadillas y saltos), 1.000m. de remo, 200m. de carga con pesas de 32 kg, 100m. de zancadas cargando sacos de arena de 30 kg y lanzar 100 veces contra la pared un balón medicinal de 9kg .
"Es un deporte accesible para todo el mundo", apunta Rubén, ya que los pesos varían en función de la categoría, incluida la pareja mixta. La suya es la Pro, el rango de dificultad más elevado y a la que accede por invitación y sin tener que pagar inscripción.
"Recibí muchas felicitaciones. La gente está muy sorprendida y orgullosa de mí", celebra el vilagarciano, que en Barcelona volvió a romper sus límites y paró el crono en una hora y 19 segundos. Fueron sus compañeros de gimnasio quienes lo animaron a probar esta modalidad. "De pequeño jugaba al fútbol y al baloncesto, pero pronto me interesé por el gimnasio. Siempre me gustó correr y los deportes de fuerza, así que el hyrox me encajaba perfectamente", resume sobre su reciente y exitosa pasión.
La ilusión del Mundial en Manchester
Hace seis meses acudió a su primera competición oficial en Madrid y desde entonces no ha dejado de progresar. Tras vencer en febrero en Bilbao y anotar su récord personal en Barcelona, ahora sueña con recortar unos segundos y terminar antes de la hora. Eso le permitiría colarse entre los 15 mejores del mundo y participar en la categoría élite en el Mundial, que este año cambia Las Vegas por Manchester, donde se celebrará el próximo 27 de mayo.
La prueba de fuego pasa por Malmö (Suecia), un viaje para el que sus gimnasios de cabecera, EvoFit y Wonder Company de Vilagarcía de Arousa, se han ofrecido a sufragar parte de los gastos. A falta de más patrocinios, Rubén señala que "en países donde el hyrox está mucho más extendido, como Alemania o EEUU, la gente de categoría Pro tiene patrocinadores de todo tipo. En España, como empezamos hace poco, los que estamos arriba nos costeamos todo. Yo lo hago por pasión, pero para competir con los mejores del mundo se necesita apoyo".
¿Las claves de su estado de forma? Comer sano, un buen descanso y un entrenamiento diario "muy exigente". A veces le resulta difícil conciliar con su trabajo, pero Rubén no duda en levantarse "a las seis de la mañana" cuando es necesario. Su objetivo es llegar a lo más alto, aunque reconoce que los mejores del mundo están, de momento, "dos pasos por encima". "Me quedan un par de años para estar a su nivel, pero con entrenamiento y ayuda todo es posible", afirma, seguro de que el hyrox ha llegado para quedarse. "Está enganchando a mucha gente y se están haciendo formaciones y gimnasios oficiales. A mí me gustaría seguir vinculado tanto como deportista como formador".