UNA DOBLE PASIÓN
Juan Bosco mezcla su trabajo con su pasión. Por las mañanas, trabaja en la base aérea de Morón, donde es Sargento primero; por las tardes, enseña taekwondo a los más pequeños en la escuela de Alcalá de Guadaira, en Sevilla.
"Los padres se sienten muy bien porque ven que somos gente humilde, que enseñamos unos valores que en otros sitios no se enseñan", explica Juan, que también asegura que no enseñan "a pegar, sino a defenderse".