RECTIFICARON Y LE DIERON EL ORO
El español Orlando Ortega, recompensado por fin con la medalla de bronce por el Jurado de Apelación de los Mundiales tras ser obstaculizado por el jamaicano Omar McLeod en la final de 110 m vallas, atendió a los medios para compartir sus sentimientos: "Ahí arriba hay un Dios", dijo en los Mundiales de Catar de Atletismo.
"Han sido minutos de una mezcla de emociones impresionante. Estaba esperando a que me dijeran algo, me dijeron que viniera, que me vistiera y que corriera para el estadio. Ha sido emocionante", contó el español.
"No sabía qué hacer -relató- Sólo quería coger aire, estar solo. Gracias a Dios, al pueblo de España, al que estoy eternamente agradecido. Esta medalla es un paso más para trabajar para España. Gracias a la Federación, que estuvo desde el principio conmigo. A todo el pueblo de España, gracias por todos los mensajes de apoyo y ánimo. Los he visto uno a uno, no pude responder a todos, pero gracias de corazón a todos. Ahora a disfrutar de esta medalla".
"Ahí arriba hay un Dios. Creo mucho en él y este momento tenía que llegar. Muchas gracias a todos por el apoyo y ahora a disfrutar. No quiero llorar, pero estoy muy emocionado. Cada mensaje que he leído en Twitter, en redes sociales, de apoyo, de ánimo, de todas las personas que han estado protestando... no tengo palabras. Hay Orlando para rato, vamos a seguir luchando y trabajando. Llegaremos a Tokio en pleno estado de forma. Seguiremos luchando", dijo tras recibir el bronce un día después de la carrera.
El Jurado de Apelación estimó finalmente una segunda reclamación del equipo español presentada con nuevas pruebas sobre la obstrucción que sufrió Orlando Ortega por parte del jamaicano McLeod.