Rafa Nadal
París se volcó ayer con el balear; sin embargo, no siempre fue así. Hace no mucho, el público celebraba sus errores ante tenistas como Roger Federer o Nolan Djokovic.
Hoy la prensa francesa se deshace en elogios y superlativos con Rafa Nadal. El diario deportivo francés de referencia L´Équipe lleva en portada a Rafa Nadal sosteniendo la copa "para la eternidad". En el interior del diario se le compara incluso con Luis XIV, el Rey Sol, en alusión a esa decimocuarta victoria cosechada ayer. Le Parisien también lleva en la portada a Rafa Nadal.
Rafa Nadal ha acudido esta mañana a Espejo Público donde ha contado lo duras que han sido estas dos semanas. Tras superar a sus oponentes, en cuartos se enfrentó a Djokovic. "Creo que no era favorito en ese sentido, pero bueno, me salió el mejor partido el día que tenía que salir", comenta el balear.
Y es que Rafa no siempre lo tuvo tan fácil, al principio le costó ganarse al público francés.
Una historia de amor entre Rafa y Francia
Cuando Rafa Nadal llegó a Roland Garros en 2005 tenía 19 años, con un estilo y un físico que no terminaba de convencer por el que de hecho llegó a ser abucheado. En aquella época había sobre todo un favorito, el suizo Roger Federer, pero a lo largo de estos 17 años y las 14 victorias Nadal ha sabido meterse a los franceses y al público de Roland Garros en su bolsillo con los valores que transmite, con ese espíritu de sacrificio y de superación, y esa entrega que hemos visto en estas dos últimas semanas de Roland Garros.
El público francés le recibió con recelo e incluso se aplaudían sus errores. 17 años después le han hecho una estatua de 3 metros de alto, le dieron la Medalla de Honor de la ciudad entregada por Quintana, alcaldesa de París, y hasta se permiten juegos de palabras con su nombre, "Rafael Garros", como así publicaba la cuenta del torneo en su Twitter.
Un cumpleaños con sabor a victoria
Su cumpleaños coincide todos los años con este torneo, lo que le permite disfrutar del mismo con muchos regalos y tartas, hasta los recogepelotas le escribieron "Happy Birthday" sobre la tierra batida.
Ha conquistado París con su tenis y su educación. A base de ganar allí ha aprendido ya un poco de francés, que el público obviamente agradece, tal y como se veía ayer en las celebraciones cada vez que se dirigía al público en su idioma.