Motor
Muchos apuntan a que las motos voladoras pueden suponer una revolución en los transportes y la forma de movernos en las ciudades. Es más, en Dubái la policía ha iniciado las pruebas para aprender a pilotar las motos eléctricas voladoras con las que pretenden patrullar la ciudad desde el aire.
Las ventajas de este tipo de vehículos son evidentes, pero también los riesgos. Y es que al desplazarse por el aire, a varios metros de altura, cualquier accidente puede resultar fatal.
Eso es lo que ocurrió con la prueba que realizó la empresa 'Hoversurf' con una Hoverbike, la famosa moto voladora y uno de los modelos con el desarrollo más avanzado de su sector.
El problema es que en esa prueba de vuelo el piloto acabó perdiendo el control de la moto voladora cuando se encontraba a 30 metros de altura.
Moto y piloto cayeron en picado en un espectacular accidente, grabado con dos cámaras por la propia empresa 'Hoversurf', que, tras el aparatoso accidente, apuntaba que "todos los sistemas de seguridad funcionaron bien y el piloto no resultó herido. La seguridad es nuestra principal preocupación”.
Posible herramienta para la policía de Dubái
La Policía de Dubái lleva tiempo realizando pruebas para aprender a pilotar las motos eléctricas voladoras con las que pretenden patrullar la ciudad desde el aire.
La moto voladora es un vehículo eléctrico que despega y aterriza en vertical. Cada una tiene un precio de 120.000 euros. Esta fabricada en fibra de carbón, pesa 114 kilogramos y vuela a una velocidad máxima de 96 kilómetros por hora.