LA ÚLTIMA PIEZA DEL PUZZLE
A Fernando Alonso le van quedando menos días para afrontar su nueva prueba en las 500 Millas de Indianápolis, la segunda vez que disputará la mítica prueba.
Es su gran reto de cara a 2019, un reto para el que ya tiene hasta una gorra especial preparada. En esa gorra, tiene dos de las coronas que ya ha conseguido, la del GP de Mónaco y la de las 24 Horas de Le Mans.
La carrera, el 26 de mayo
Sin embargo, a esas dos coronas les falta la compañía de una tercera, una corona que tiene su hueco hecho para cuando Alonso logre imponerse en la mítica carrera norteamericana.
El asturiano correrá con el número 66 en su segunda participación, un dorsal que homenajea al primer ganador de McLaren en Indianápolis: Mark Donohue. La carrera se disputará el 26 de mayo.